Es cierto que la tecnología ha sido
un importante aporte al desarrollo de las sociedades contemporáneas, su
vertiginoso avance ha sobrepasado los límites del tiempo, favoreciendo a todos
los ámbitos y rubros, siendo un elemento transversal y vital en nuestra sociedad, ya que a la velocidad
que evoluciona cuesta predecir cuáles serán las herramientas y cambios que nos
depara en el futuro y sobre todo como adaptarnos a ella.
La educación no se aleja a esta
realidad, y aunque muchos visionarios ya venían anticipando los cambios que
traería la tecnología a esta área, no se ha notado un cambio en el ámbito de la
enseñanza y aprendizaje que imparten nuestros docentes. Hay algunos que creen
que la tecnología es capaz de reemplazar la labor del profesor, ya que los
alumnos del siglo XXI nacieron con un computador en sus manos, la conectividad
es parte de su vida, no conciben estar ausentes de esta tecnología, es por ello
que cada vez es más común, ver estudiantes que escogen la opción de educarse en
forma individual, aprender y enfatizar las materias que realmente le interesan,
en el momento y lugar que quieren, es decir, son verdaderos autodidactas; sin
embargo será suficiente y realmente eficiente el aprendizaje a través de esta
modalidad. Es por ello hay seguidores de esta tendencia, quienes apoyan en
cambiar la educación clásica; como la conocemos; a una más vanguardista,
aprovechando los medios tecnológicos que se han desarrollado y potenciar el
auto aprendizaje, contando con profesores que desde otro lugar en forma virtual
y conectados vayan guiando al alumno. Muy por el contrario, hay otros tantos que no cambian la tradicional
”sala de clases”, ya que sostienen que es en ella donde el profesor juega un
papel preponderante en la formación del alumnos, más allá del traspaso de
conocimientos, sino que una formación integral, con transmisión de valores que
no se enseñan a través de un computador.
En mi opinión creo que ambos son necesarios
y complementarios, ya que la labor que juega el profesor “presencial” es
irremplazable, más aun en los primeros años de formación. No solo desde el
punto de vista del traspaso de valores y conductas morales que no se enseñan a
través de un computador, sino por la interacción enseñanza - aprendizaje que
debe lograr con el alumno, principalmente relacionado con el traspaso de estratégicas
de aprendizaje, ya que por más que un alumno quiera y tenga la voluntad de
aprender, debe conocer la forma de aprender y fortalecer esta voluntad y de
esta manera logren aprender en forma independiente, pasando paulatinamente esta
responsabilidad al alumno. Del mismo modo no debemos olvidar que muchos de los
problemas que los docentes enfrentan en la escuela, son producto del desinterés
por aprender que experimentan los alumnos y es ahí donde recae en gran medida
la labor docente del profesor.
Finalmente no debemos olvidar el
tipo de alumno que hoy nos vemos enfrentados, es por ello que debemos
complementar su aprendizaje empleando la tecnología existente, siendo un
verdadero mediador entre el alumno y ésta. Es por ello que la principal
responsabilidad recae en los docentes del siglo XXI,ya que deben ser ello los
encargados de generar esta interacción y desarrollar estrategias de enseñanza
que estén a la vanguardia de los tiempos modernos.
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